No te ha tocado una vida fácil, has tenido que correr junto a mí, solos tu y yo, muchas veces observo tu carita preguntando ¿porque? Ante la cual actúo de lo más natural, dándote a entender que las cosas son así, no siempre fáciles algunas veces difíciles y otras muy difíciles, así con este lenguaje muchas veces sin palabras, tu observando guardando todo en tu corazón y yo actuando tomando la vida de frente, te veo crecer un poco cada vez, sintiendo también nostalgia del bebe que una vez protegí en mis brazos. Cuando te observo muy pensativo sé que tu corazón de niño aun no logra entender, es cuando te muestro sin rencores ni reproches, sin culpables que la vida es un reto y que a pesar de todo no estamos solos que Dios es bueno y sabe escuchar. Sé que te convertirás en un padre amoroso, guardián de tu familia, que amaras a tu esposa cuidaras de ella, sabrás el valor de las cosas las disfrutaras y cuidaras cuando estén en tus manos… y tus hijos cuanto sueñas en tener hijos, quizá porque creciste solo, sé que jugaras con ellos te harás un niño junto a ellos y serás también exigente y disciplinado cuando se necesite.
Estoy sembrando, bajo el intenso, intensísimo sol, bajo la lluvia, el frio y algunas veces con hambre caminando kilómetros una y otra vez contigo de la mano teniendo presente en cada paso que el ejemplo arrastra muchísimo más que mil palabrerías.
______________________________________________________________

solo texto
¡Qué valioso es el amor de una madre guerrera y valiente! Dios te ha encargado a ese niño, en el cual vas sembrando valores y sentimientos buenos…lo cual hará de él un gran hombre. Felicito tus letras sinceras y transparentes y también te felicito por la belleza de tu blog. Recibe mi cordial saludo. Ingrid Zetterberg desde Lima Perú.
Hola sin duda una madre pone en el corazón de sus hijos lo que ellos dejaran a su vez en los suyos.
Muchas gracias por tu comentario y por pasar, saludos desde México 🙂